miércoles, 3 de febrero de 2016

SUCEDIÓ EN NAVIDAD Candelaria Díaz




Estas fiestas ya no son tan tiernas y familiares como antaño, cuando eran alegría y se compartía con cariño y amor lo que había.  Ahora hay demasiada comida y siento pena porque algo se termina tirando siempre.
Los jóvenes comen en familia, pero luego no disfrutan de ella; salen con sus amigos: eso es lo que hay.
Los que nos quedamos, recordamos con nostalgia hechos pasados.  En casa no falta recordar a un familiar y al huerto de su madre lleno de claveles, era especial con su espíritu navideño; irrepetible…  Siento añoranza.

Gracias a Dios que me quedan mis hermanas para meterme con ellas.  ¡Feliz Año Nuevo!


1 comentario:

  1. Y, menos mal que tú le quedas a ellas y que todas guardan hermosos y bonitos recuerdos que revivir cuando quieran. Feliz Año para ti también, Candelaria y un abrazo cargado de cariño

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