miércoles, 14 de marzo de 2012

VERDAD A LA VISTA de Elda Díaz

 

    Hace unos años me ocurrió lo que les voy a contar.  Era Navidad y en la Nochebuena solíamos cenar todos  en casa de mis padres –ahora de mi hermana– mientras que el día de Navidad almorzábamos en mi casa. En total éramos veinte.  Cuando pusimos la mesa me faltaban cubiertos, así que les dije a los niños que fueran a casa de mi hermana para traer los cubiertos que hacían falta y así solucionamos aquel inconveniente.
Mi nuera tomó nota de aquel asunto y por Reyes me regaló un juego de cubertería de, nada más y nada menos, noventa y seis piezas.
Lo más gracioso fue que, algo más de un mes más tarde, mirando encima del armario descubrí que ya tenía otra cubertería de noventa y seis piezas que, por un enorme despiste mío, había olvidado por completo.  La verdad estaba a la vista pero yo no la había visto. ¿Qué iba a hacer yo con ciento noventa y dos piezas?

2 comentarios:

  1. Traes al taller anécdotas divertidas, interesantes, sencillas y verdaderas, contadas cada vez mejor. Tus progresos son notables, lo que me hace sentir muy orgullosa.

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  2. ANDATE CON OJO PARA OTRAS NAVIDADES, MIRA QUE HAY SIEMPRE QUIEN ESTÉ AL LORO DE LO QUE HACE FALTA, ASÍ QUE PIDE ALGO ESTUPENDO Y APROVÉCHATE, YO LO HARÍA. SALUDOS MARY

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