miércoles, 7 de marzo de 2012

La escalera de mi niñez DE AMALIA JORGE FRÍAS

La escalera de mi niñez   




La casa donde transcurrió mi infancia era terrera.  Tenía un gran patio con una gran escalera  de madera que comunicaba con la azotea. En cada uno de sus escalones había una maceta con flores y uno de mis pasatiempos preferidos era subir muchas veces y aumentando un escalón hasta llegar al último.  Más de una vez rompí alguna maceta ante lo cual mi reacción era ponerme a llorar porque me daba mucha pena.  Por esa razón mi madre, en vez de regañarme, me tenía que consolar.
Después de casada, he vivido siempre en edificios altos, con ascensor pero, la escalera de mi niñez sigue en mi mente y algunas veces sueño con ella.  En mis sueños ya no tiene macetas con flores y resulta más amplia, si embargo yo voy más despacio y no alcanzo a ver el final.  Me conformo con ir subiendo cada día un escalón más.


2 comentarios:

  1. Dulce y entrañable memoria de una escalera. Me gusta que su lectura nos conduzca del pasado al presente como si de una escalera metafórica se tratase. Muy bien.

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  2. QUERIDA AMALIA: TAMBIÉN YO VIVÍ DE SOLTERA EN UNA GRAN CASA TERRERA CON PATIO CENTRAL, TENIA DOS ESCALERAS QUE DABAN A LOS GRANEROS, POR ESO TU ESCALERA ME RECUERDA A LAS MÍAS QUE ERAN DE MADERA. TU RELATO PRECIOSO

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