viernes, 1 de junio de 2012

LOS INTRUSOS de Teresa Jiménez






A mi vivienda de La Laguna, llegaban 
intrusos cuando menos lo esperabas. Como con quien se entendían era con mi hijo Manolo, tenían que esperar porque a veces esas visitas demoraban horas.  Para que no se aburrieran y mientras esperaban, les daba una revista y ellos se pasaban la tarde leyendo.

Por fin, cuando llegaba mi hijo, se los llevaba al 
paredón, con revista y todo.  Aquellos intrusos no eran 
otros que unos molestos ratones

2 comentarios:

  1. Relato escrito con ese estilo propio al que nos tienes acostumbrados, lleno de chispa y picardía. A todas tus historias les pones ese sello personal que los caracteriza y los hace únicos.

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  2. Tan divertido como siempre tu bonito relato. El tono simpático como lo eres tu.

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