martes, 9 de octubre de 2012

EL PRESENTE EN GUAGUA de Edelmira Linares





Cada día la misma rutina, desde que amanece hasta que oscurece.  Me levanto temprano, me ducho, me visto, tomo lago ligero y salgo corriendo para no perder la guagua y así, aprovechar la mañana.
Hoy, a pesar de ser miércoles, aún me siento llena de vitalidad y muy optimista, lo cual es raro después de una semana tan ajetreada como la que he tenido.
Ya en la parada, me resguardo dentro de la marquesina porque está empezando a llover y no me quiero mojar el pelo porque deseo que me dure bien para el fin de semana.  Acaba de llegar la guagua y subo a ella sin demora para poder sentarme antes de que reanude la marcha.  Una vez acomodada en mi sitio, miro a mi alrededor y me percato de la presencia de una persona que me resulta conocida. ¡Ay!, creo que es mi profesora pero, dudo, porque ella no acostumbra viajar en guagua.  Sigo intrigada, el parecido es enorme.  Claro, estaba de espaldas pero, ahora que se ha girado…¡es ella!, tan vital y risueña como siempre.  Y yo, sin más, le grito: ¡Isabel, Isabel! pero, no me oye.  La sigo con la mirada y veo como baja y cruza la calle.
¡Qué pena me deja no haber podido hablar con ella sobre unas dudas que tengo!  Quería comentarle algo respecto al taller…, es que en la clase no encuentro el momento oportuno para ello.  Pues, no importa, esta tarde la veo de nuevo, como todos los miércoles y tal vez surja la ocasión…



2 comentarios:

  1. Sorprendida he quedado al verme subida a esa guagua, convertida en un personaje de tu relato. Ingenio al servicio de la narrativa. ¡Divertido giro el que has dado a tu particular versión en tiempo presente, de relatos en la guagua!. Muy bien.

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  2. CON TU INGENIO, LLENAS TUS RELATOS DE GRACIA, TERNURA, AÑORANZA...ME GUSTA LEER TODO LO QUE ESCRIBES.ERES MUY VERSÁTIL,DIVERTIDA Y ESPONTANEA, ESO ENRIQUECE TODO LO QUE CUENTAS.

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