lunes, 3 de diciembre de 2012

NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA de Candelaria Díaz





Hoy trabajo en el turno de noche.  Quiero salir antes para hablar con mi novio; no entiendo su actitud.  Últimamente está muy cambiado, frío, distante conmigo.  Hoy le diré que lo nuestro no funciona.  ¡No sé como decírselo!.  No quiero herirle…
Llego a casa, voy a nuestro cuarto, abro la puerta y me quedo helada: ¡mi novio en la cama, retozando con el vecino del quinto!.  Salgo de allí asqueada.  ¡Esos lotes son los que lo alejaban de mí!.  Y mira que es guapo, es un Rod Hudson, pero igualito por dentro que por fuera. ¡Qué desperdicio!, en fin:
“¡No hay mal que por bien no venga!”



3 comentarios:

  1. Me había estado preguntando cómo ibas a resolver este relato con moraleja, dándole tu vuelta de tuerca personal. ¡Te has superado con la historia de este trío amoroso tan particular!. Gracias por las risas y las sonrisas, Caya.

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  2. Querida Caya, me encanta todo lo que escribes y te envidio tú imaginación,y no me digas que eso se lo digo a todas, porque no es verdad.

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  3. Te mereces los elogios de las comentaristas, sigo pensando que eres ¡ fantástica!

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