lunes, 16 de marzo de 2015

SOY LA SILLA Lucía Hernández





La palabra silla la llevo en mi corazón igual que la luz del día, son muy grandes los recuerdos. Se llama silla un mueble que tenemos en nuestras casas para sentarnos. También recibe este nombre la que usan los jinetes para sus caballos  cuando van a competición.
            Hay otras sillas que son las de mi recuerdo. Mi abuela se cayó, se fracturó la cadera y el resto de su vida lo pasó sentadita en una silla de ruedas, creo que en esa época  no existía esto de operaciones, no lo recuerdo, o quizás les faltaba luz para hacerlo.
            Esto de la silla de ruedas la tengo presente a todas las horas del día, pues en mi pierna tengo cinco operaciones, tres en la cadera, una en la rodilla y otra en el tobillo, todo han sido caídas tontas, siempre he tenido que usar la silla ortopédica, la tengo en mi casa para recuerdo. He pasado muchos dolores y muy malos ratos y he tenido que hacer uso también de muletas y andador, algunas veces la pierna me duele pero aunque no sea muy bien le doy gracias a Dios por poder caminar. De todo esto me da mucha pena tener que recordar, pero con paciencia todo irá pasando.




3 comentarios:

  1. Los objetos nos hablan muchas veces. A ti la silla te ha traído recuerdos, imágenes de un pasado atado a la memoria de los seres queridos que se fueron.

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  2. Lucía, a Felipe II, lo transportaban en una silla, pues padecía de gota. Mª Dolores.

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  3. Lo importante es que la vida es bonita y hay que vivirla con alegría. Creo que esa es tu filosofía..

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