AMALIA
Cuéntanos algo sobre tu
primer embarazo. Cómo recibiste la
noticia, cuáles eran tus dudas, tus miedos.
A los dos
meses de casada, en plena luna de miel, la noticia de que iba a ser madre,
aumentó en mayor medida, si cabía, la felicidad que estaba viviendo en mi nuevo
estado de esposa. Esos meses, a pesar de
las vicisitudes propias del embarazo, fueron para mí de los mejores de mi
vida. Cuando se fue acercando la fecha,
tenía muchos sentimientos enfrentados: a los de alegría y felicidad por ser
madre, se unía el miedo a lo desconocido.
Eso era algo que no podía compartir ni con mi propio esposo pues
imaginaba que él sentiría lo mismo y yo quería darle la imagen de mujer fuerte y
decidida. Hasta tal punto sentía miedo
que, una tarde, cuando faltaban pocos días para el parto y, a pesar de tener la
habitación de la criatura completamente preparada, cerré los ojos y pensé que
si en aquel momento pudiese retroceder, aunque nunca tuviera hijos, no me
hubiese importado. Con eso, pueden
hacerse una idea del pánico que me invadía.
Gracias a
Dios, todo salió bien y el primero de mayo, un sábado, vino al mundo mi primera
hija, siendo su llegada motivo de alegría para nosotros, para las abuelas y
para los tíos, pues para todos era una novedad; una experiencia nueva y
maravillosa.
Aún recuerdo
cuando mi marido, al salir yo del paritorio en la camilla, se acercó a mí y
dándome un beso en la frente, me dijo:
-A las
madres, se les besa en la frente
No sé dónde
había él oído eso. Más bien creo que
como era vergonzoso, lo inventó para no besarme delante de la enfermera.
Al día
siguiente, al ser el primer domingo de mayo, se celebraba el Día de la madre
por lo que, las personas que me iban a visitar, me felicitaban doblemente.
Luego, con
el tiempo, vinieron tres hijos más pero, yo nunca más volví a sentir miedo,
¡todos me llenaron de felicidad!.
Dulces, intensas y emotivas vivencias que agradezco hayas compartido con nosotros. Como madre, veo reflejada en tus palabras, mi propia emoción, además del miedo a lo desconocido de la primeriza que fui.Eso habla de que lograste, como escritora, transmitir emociones.
ResponderEliminarLOS SENTIMIENTOS AFLORAN EN TUS RELATOS, DEJANDO VER LA PERSONA SENSIBLE QUE SE ESCONDE TRAS CADA FRASE.COMPARTO TU EMOCIÓN Y TEMOR EN UNA SITUACIÓN TAN DULCE Y DESCONOCIDA. SIEMPRE HAY UNA PRIMERA VEZ QUE SE SUPERA VENCIENDO AL MIEDO. LO IMPORTANTE ES LA FELICIDAD DE ESE MOMENTO QUE JAMÁS SE OLVIDA. ¡¡ARRIBA!! HASTA PRONTO.
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