En tiempos muy
remotos, existió un pueblo en el que las gentes tenían mucho miedo de
vivir. Decían que estaba embrujado
porque, de la torre que había en el centro de la aldea salían miles de brujas por
las noches, montadas en escobas y que éstas eran perversas, muy perversas. Se contaba que, a las personas que pasaban
cerca de, le asestaban escobazos hasta dejarlas moribundas. Luego las metían dentro de la torre y allí
las quemaban. Por las noches se oían
lamentos, gemidos y arrastramientos de cadenas.
Las brujas salían con formas fantasmales; unas sin cabeza y otras sin
extremidades. Decían que todo el mundo
podía verlas porque desde la torre, se elevaban a gran altura.
Para poner fin a esa
terrible situación, cuentan que los habitantes decidieron quemar el pueblo
entero. Así se terminó el miedo y así
acaba esta historia que es leyenda.
Bienvenida al taller y al blog. Este es tu primer escrito, aunque ya tuvimos oportunidad de escuchar de viva voz una simpática historia contada por ti. Este relato de miedos y brujas es un buen comienzo. No lo haces nada mal así que te animo a seguir adelante, contándonos historias reales o inventadas como esta. Muy bien, Carmita.
ResponderEliminarMUY EMOCIONANTE LA HISTORIA DE LAS BRUJAS.HASTA MIEDO ME PRODUCE LEERLO. MENOS MAL QUE EL PUEBLO YA NO EXISTE, DE LO CONTRARIO ME PENSARÍA MUCHO PASAR ALLÍ.
ResponderEliminar