El poeta Khalil Gibran dice:
Tus
hijos no son tus hijos,
son
hijos e hijas de la vida
deseosa
de sí misma.
No
vienen de ti sino a través de ti
y
aunque estén contigo
no
te pertenecen.
Hoy, yo me aplico esta sabiduría para tratar de
mitigar los miedos y la incertidumbre ante la inminente partida del hijo.
Aunque hace varios años que no vive con
nosotros, ahora su partida es más larga.
Se dispone a colaborar con una ONG en Austria. Su labor va a consistir en ocuparse de niños
pequeños en riesgo de exclusión social.
Durante un año va a vivir en ese país. Su pasión es la docencia y por
eso está muy ilusionado.
Entendiendo todo esto, no puedo evitar el
sentimiento de vacío de los afectos que nos unen a los hijos. En una etapa de la vida, los hijos son el
motor que nos impulsa a luchar, pero como dice el poeta, ellos son hijos e
hijas de la vida, deseosa de sí misma.
Profunda reflexión que hago mía, por cercanía total con las propias vivencias. Gracias por traer a la memoria las sabias palabras del poeta.
ResponderEliminarTus sentimientos los expresas de una manera patenten como sueles hacer siempre. Por suerte tu hijo está muy feliz y se que tu también lo estará por él.
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