miércoles, 5 de marzo de 2014

LO QUE PASÓ De Mary Rancel



Parece un caso increíble por lo poco usual,  pero es muy cierto.
Hubo un tiempo en que me dediqué a pensar. Me pasé largas noches pensando y pensando en una cosa concreta hasta conseguir que esos pensamientos o ideas se hicieran realidad.
Una mañana al levantarme de la cama y verme reflejado en el espejo, pude comprobar que me había transformado en un elefante, -mi gran ilusión de hacía tanto tiempo-. No era demasiado grande pero si lo suficiente como para impresionar. Salí a la calle a dar un paseo y los niños se arremolinaron a mi alrededor –no causaba miedo-.  Me extrañó la familiaridad de los pequeños conmigo, todos querían subir a mi lomo, tocar mi trompa, acariciar mis orejas…¿Qué estaba pasando?, no podía comprenderlo; yo quise se elefante para intimidar a las personas, para imponer acatamiento pero…si los enanos sólo quieren jugar conmigo, ¿qué pasará con los mayores? Será como siempre, seguirán tratándome sin contemplaciones, sin darme un poco de afecto. Todos los habitantes del pueblo solo me han querido para que trabajara para ellos sin darme nada a cambio.
Unas lágrimas surgieron de mis ojos, ¡prodigio!; los niños al notarlo las limpiaron con sus pequeñas manos, algunos halagaban mi cabeza y, uno de ellos, me besó la trompa con cariño. Yo no cabía en mí de gozo. Paseé a los críos durante horas. Al atardecer dejé a los niños en la plaza del pueblo, todos los padres me aplaudieron, me dieron para comer plátanos, hierbas y frutos.
Esto de ser elefante me ha cambiado la vida, soy feliz, tengo amigos y todos los vecinos me adoran; duermo en el gran parque y puedo deambular por el lugar sin que se opongan a ello.
Los pequeños me hablan, me cuentan sus cosas, les entiendo y trato de contestarle pero, aun no lo he conseguido. Voy a dedicar unas cuantas noches a pensarlo con ahínco hasta conseguirlo, cuando lo logre se los contaré.


3 comentarios:

  1. Lo que pasó es que has construido un bonito cuento que, sin ser infantil, se mueve en este territorio con gran soltura y acierto.

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  2. El que quedó estupendamente plasmado en la foto es el elefante . Tiene un poco de falta de vista, lo has adivinado a pesar de no estar especificado en el cuento. Tu sagacidad es aplastante. Gracias querida Isabel.

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  3. Me ha encantado el cuento. Eres estupenda narrando. Mª. Dolores.

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