martes, 30 de octubre de 2012

UN DESEO CUMPLIDO de Teresa D.





Soy una joven que siempre había sentido el instinto maternal.  Cuando miraba a un niño, pensaba que algún día tendría los míos pero, después de varios años intentándolo por todos los medios y de someterme a todo tipo de tratamientos, me convencí de que era  imposible lograrlo.
Una tarde, mientras estaba sentada en el parque observando a tantos niños jugando, decidí definitivamente que en alguna parte había un niño que necesitaba una madre que lo adoptara y lo quisiera como a un hijo así que, sin mirar atrás, convine en que no seguiría esperando.  Iría a buscarlo.
Hoy ya he encontrado lo que siempre había deseado.

2 comentarios:

  1. Perseguir los sueños, siempre, aunque a veces parezcan imposibles. A eso nos invita tu relato, Teresa. Muy bien.

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  2. TU HISTORIA TERMINA BIEN COMO EN LOS CUENTOS, ESO ES MUY BUENO.

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