Siempre que llega el Otoño, vuelven las oscuras golondrinas, como decía el poeta. El sol brilla menos al entrar en la tercera
estación del año. Empieza el mal tiempo,
las primeras lluvias, los días más cortos, la tristeza y la soledad afloran y se
manifiestan con sensación de vacío. Para
más inri, el país con problemas y eso encoje el alma y ¡el bolsillo!. Con este panorama, compramos loterías para
animarnos, soñar despiertos y levantar el ánimo. Al menos, para nosotros los canarios –gracias
a la belleza de nuestra tierra –nuestras golondrinas no son tan negras y se
llaman andoriñas.
*Poema de
Gustavo Adolfo Bécquer
Espero tu escrito de cada semana para ver con qué me sorprendes. Nunca me decepcionas porque siempre le das tu giro personal a las cosas, llenándolas de una autenticidad y una frescura que se agradece. No sabes cuánto. Gracias, gracias y un abrazo, Candelaria.
ResponderEliminarLA ILUSTRACIÓN PERFECTA, ISABEL. EN CUANTO AL RELATO MAGNIFICO, COMO DE COSTUMBRE EN TU LÍNEA. ERES IDEAL ESCRIBIENDO Y, EN TU DÍA A DÍA.
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