martes, 5 de febrero de 2013

ESPANTAPÁJAROS de Candelaria Díaz





Soy un fantoche creado para espantar todo lo que vuela.  Los niños se burlan de mí y de mi vestuario viejo y andrajoso. ¡Señor, qué tristeza y soledad! No he reído en toda mi vida.  Ellos creen que no tengo alma; se equivocan.  Dicen que el abrigo que llevo era del amo que viajó a península.  Lo huelo y tiene olor a tabaco del bueno, a las mujeres que achuchó, a los niños que abrazó, así que… algo siento.
Lo más triste es lo solo que estoy, crucificado siempre, en medio de vientos o calores.  Lloro, ¡sí lloro! y si no me creen, vengan y verán la tierra mojada.
También hay algo bueno como el amanecer, el sol que calienta, los canarios cantando, el ocaso del día y esta luna que me ilumina.
Creo que mi ánimo mejoraría si pusieran a mi vera, una compañera espantapájaras.



2 comentarios:

  1. ¡Qué bueno! Esa voz narrativa en primera persona, poniéndole alma y sentimientos a un espantapájaros, me ha encantado, por varias razones, principalmente porque uno empatiza sin problemas con su soledad, pero sobre todo, se conmueve con su falta de amargura, pese a todo.

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  2. Eres tan especial narrando, que espero impaciente cada semana para leer lo que escribes. Nunca me defraudas, todo lo contrario, me encanta lo que haces y como lo haces. Un abrazo. Mary

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