Mi abuela contaba que, cuando ella era pequeña, su
familia emigró a Montevideo. Vivían en la costa, en un pueblo de pescadores y
casi todas las tardes solían ir a merendar a la playa, sus
padres y los hermanos mayores –porque ella era la menor de sus hermanos –. Repetían
una y otra vez que el olor del mar los transportaba a las islas. Su hermano Antonio cogía la guitarra y Diego
el timple y tocaban y cantaban folías, isas, seguidillas y de todo nuestro
folklore musical. Les parecía que con los cantos y la música estaban en nuestra
tierra y las maguas se disipaban. Aunque estuvieran en la otra orilla del
mundo, para todos, aquellos momentos eran puramente ¡Canarios!.
Palabra que pertenece al acervo cultural de Canarias, con un significado que nos habla de nostalgia, de pena… Aventurarse en su etimología puede ser un viaje fascinante.
ResponderEliminarTan solo leer la palabra "maguas" me ha traído recuerdos del ayer. La narración me ha gustado, como todas las tuyas.
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