Sobre el corazón, mi
mano he puesto a pensar: así es mi nombre, mi camino que busca una luz a ver si la
encuentra, todos sabemos por qué mi dolor y aun teniendo pena, he cantado con
amor. Cuando ves que amanece un nuevo día, das gracias al cielo por vivir y
llevas el dolor con alegría.
Mi vida no ha sido muy
fácil, he trabajado mi parte, en mi juventud vivimos en mi pueblo o sea
Puntallana, La Palma, allí tenía muchas amistades, dos compañeras de estudio
hicieron Magisterio, siempre conservamos nuestra amistad y como es normal
tenían su escuela; algunas veces cuando alguna se enfermaba o daban a luz, me
llamaban para yo sustituirlas; así estuve largas temporadas (cosa que hoy no se
puede hacer).
Más tarde, vivimos en
Santa Cruz de la Palma, allí me dediqué a coser; pasados los años, por mis
circunstancias, hoy me encuentro aquí en Santa Cruz de Tenerife, gracias a mi
familia, porque si no fuese así, tendría
que vivir en la soledad. Tengo varias personas y amistades que sé que me aprecian
mucho, yo también les ofrezco mi cariño y mi amistad.
En la actualidad,
participo en un Centro o Taller de Narrativa llamado “Flores del Teide”, en el
cual me siento muy a gusto porque hay una convivencia envidiable, parece una
familia, empezando por nuestra profesora, diremos que es un sol, y nuestra
directora la luna, y el resto de compañeras estrellas. Por medio de todas ellas
nos llenamos de luz, del día hasta el atardecer, y cuando llega la noche,
deseamos que llegue un nuevo día.
Este taller es muy
acogedor; nuestra amistad es un lucero que alumbra nuestras vidas, allí se ríe y llora, se aborrece y ama,
hacemos algún cuento para pasar algunos ratos alegres. De vez en cuando,
hacemos alguna excursión en la que también pasamos buenos momentos. Espero que
todas estas vivencias que disfrutamos con cariño, nos ayuden a recordar poner siempre todo nuestro empeño en estar felices y
alegres.
Hoy dejo las rosas que
llevo entre mis brazos, me olvido del día y de las horas, y sólo pido a Nuestro
Señor que a todos nos dé salud y alegría para poder seguir en este lugar de convivencia que nos alegra
la vida.
Para todos deseo lo
mejor y les ofrezco mi cariño que es muy sincero.
Gracias, Lucía. Haciendo honor a tu nombre, eres un lucero que brilla con luz propia y, ayudada de esa voz tan poderosa que posees, nos regalas siempre momentos inolvidables e historias fantásticas
ResponderEliminarOtra bonita historia de una vida llena de sabiduría como es la tuya.Felicidades.
ResponderEliminar.....Gracias, Lucía por estas palabras tan bonitas que dedicas a nuestro taller y de paso a nosotras, y a nuestra querida Asociación de Mayores Flores del Teide demuestras lo buena persona que eres al ser tan agradecida. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Lucía por tus bonitas palabras. !Viva nuestra Asociación Flores de Teide!. MªDolores.
ResponderEliminar