lunes, 19 de enero de 2015

HAY BROMAS Y BROMAS Dolores Fernández Cano.






            Una señora, muy excitada, despierta de la siesta a su marido, agitándole por un brazo y gritando su nombre.
             –Tonino, tengo que confesarte algo. Por fin estoy embarazada. Después de tantos años e intentos, ha germinado tu semilla en mi aparato reproductor, me lo ha confirmado el ginecólogo. He superado todas las pruebas.
            El marido refunfuñando contesta:
            –Pero Brígida, lo que me cuentas es imposible, ya que somos nonagenarios.
            La esposa con una risita jocosa exclama.
            –No te lo tomes así, sé que para nosotros, todo está acabado, ¡je, je ,je!.
            El anciano algo sorprendido replica:
            –Querida, déjate de chocheras, vamos a continuar viviendo, ¡que es bastante!.




2 comentarios:

  1. El sentido del humor qué no falte, téngase la edad que se tenga. ¡Eso es saber ponerle sal y pimienta a la vida!

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  2. Con lo que ha adelantado la ciencia, hasta puede ser posible un embarazo a los noventa. No lo descarto a mis años; ya te contaré.

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