viernes, 1 de junio de 2012

UNA VISITA NO DESEADA de Amalia Jorge Frías





Aquel día, el teléfono sonó temprano.  Aún no me había levantado y me sobresalté.  Era una de mis hijas.
-Mamá, por favor, ven pronto.
Esas palabras y el tono de su voz al pronunciarlas, me alarmaron.
-¿Qué pasa?- pregunté.
-¡Ven, ven! Ha entrado una intrusa en mi casa- fue toda su respuesta.
-Pero… ¿es alguien violento? ¿te quiere hacer daño?- atine a decirle.
-¡No, no! Nada de eso pero, no sé qué hacer para que se vaya, por favor, ven pronto.
Me levanté, me vestí con cualquier cosa y me fui corriendo; en menos de diez minutos ya estaba en su casa.  Cuando entré por la puerta, miré por todas partes y no vi a nadie salvo a mi hija que no se movía de la esquina donde estaba.
-¿Pero, dónde está esa intrusa de la que hablas?- pregunté algo enfadada
-Allí, debajo del sillón – me contestó con un hilo de voz.
Me agaché y sí, allí estaba: era una tremenda cucaracha que, sin avisar ni pedir permiso, se había colado por la ventana.

2 comentarios:

  1. Divertido relato, con buen ritmo y certero tono narrativo que, juntos, llevan al lector hasta un final interesante por lo inesperado.

    ResponderEliminar
  2. EL INTRUSISMO ESTÁ TIPIFICADO COMO DELITO, ASÍ QUE A LA INTRUSA PUEDEN CAERLES UNOS AÑITOS A LA SOMBRA. TUS DOTES COMO ESCRITORA CADA VEZ SE EVIDENCIAS MÁS. FELICIDADES

    ResponderEliminar